viernes, 25 de enero de 2008

Mi Dulce y Triste Tango


Eres el mejor de los tangos, la peor de las pasiones. Eres la melodía que ha despertado el amor y la melancolía. La musica más dificil de seguir, el ritmo más peligroso de bailar. Eres un tango furioso, y a la vez tenue. Te hiceron para que la gente baile y se libere, Me siento tan libre con tus notas que dibujan el rostro de un hombre al que desearia yo poder moldear con mis manos. Llegar hasta su corazón y fundirlo con el mío. Pero la melodía se acaba, el tiempo jamás ha dejado de matar los minutos que nos quedan juntos. Tu rostro se desvanece con las notas más debiles, el pianista deja de tocar, el violín que llora describiendo tu tristeza es mi única esperanza... pero nada es para siempre... El tiempo acabó. Exepto en mi mente, Donde imagino a los dos en una dulce mañana quinciañera ambos bailando al ritmo de una canción triste, que luego se repone, la canción más hermosa la fantasía más dulce, el sueño más sueño... El tango que al fin sonrió, con el beso que jamás el tiempo dejará existir. Nuestras miradas son cómplices, esperamos vernos otra vez, cuando el tango suene en aquél café ubicado en mis sueños, los bailarines bailarán un amor de ensueño, que espera viajar en la realidad, para saludar al joven que lo vió nacer y desearle, desde la distancia, que tenga una grata vida y sus penas sanen y finalmente Su tango triste acabe.